Las revoluciones son lo que traen: revoluciones. En el caso de lo que parece (como todas) una controvertida revolución sobre las bondades y desajustes promovidos por los cambios tecnológicos de la IA, es mejor ser paciente y sensato que sensacionalista sin conocer realmente el impacto real. Alejarse de sensacionalismos de cualquier extremo por difícil que sea es siempre una buena idea y darle tiempo al tiempo a las cosas para que se desarrollen es su medida real. Un ejemplo: El hecho de que aquí pusiéramos la IA generativa a crear miles de artículos al día, realmente de que valdría si no hay tiempo humanos para leerlos. Es el claro ejemplo que la potencia sin control no vale de nada se llame como se llame. Otro ejemplo: Poder crear presentaciones rápidas y eficientes de que sirve si las personas lo que necesitamos es cariño y comprensión. Que aportarán cien presentaciones más mejor diseñadas y mejor adecuadas según la racionalidad programada en la IA?. Realmente esa capacidad afectará
La evolución del Paladio no deja indiferente a nadie. En este gráfico, vemos la evolución de diez años y podemos ver que prácticamente está en precios de entonces. Como materia prima desconocida para muchos, hoy puede ser un buen día para conocerla un poco más por ejemplo desde aquí: https://es.wikipedia.org/wiki/Paladio Puede que no sea tan demandado pero parece que todavía cubre necesidades y lo cierto es que también parece desmarcarse de la evolución de los metales más preciosos que atienden a otras motivaciones de demanda además de su demanda industrial. Si las inversiones fueran un juego, permítame un broma, no estaría mal comprar un dólar de paladio como cobertura de asistencia dental.